jueves, 4 de octubre de 2007

Lengua total y Enfoque por tareas

Ayer vimos dos nuevos enfoques de enseñanza de español como L2: la lengua total y el enfoque por tareas

Felipe explicó la "lengua total", destacando la importancia de la literatura como centro de la enseñanza de idiomas, y manejándola de forma intercativa y creativa, con la creencia de que los textos literarios reales (de los más sofisticados a los más sencillos y populares, incluidas las canciones) tienen un poder de seducción que cautiva al estudiante de L2. El profesor debe capitalizar esa motivación usando el texto como pretexto de creación linguística. En general creo que con la exposición de Felipe quedó claro el marco general de este modelo, y sólo algunas partes de su información pudieron resultar algo confusas (como las estadísticas sobre si se trataba de un método o un enfoque, pues responden en realidad a un trabajo de Bergeron, a partir de artículos relacionados con el tema).
La exposición fue enriquecida por Janeth, al comentarnos el trabajo de su escuela en los Estados Unidos con textos infantiles clasificados en niveles de dificultad, que motivaban con éxito a los niños mexicoamericanos.
Por último se leyó un tipo de actividad basada en este enfoque: a partir de dos versiones (traducciones) en inglés de un cuento coreano los estudiantes (se supone que coreanos que estaban aprendiendo inglés como L2) debían redescribir la escena en otra estación del año, localizar el pueblo en el mapa, imaginar la continuación del relato, etc.

Norma, Janeth y Alaeé nos expusieron el Enfoque por tareas, en un power point muy completo y bien diseñado. Su punto débil fue, creo, la organización misma de la exposición, donde no quedaba claro el reparto de roles ni la secuencia con la que debían presentarla, pero que compensaron con buena información sobre el tema: la importancia de la tarea (en sus diferentes concepciones) como eje central del aprendizaje, su dimensión social y comunicativa, su estructura secuenciada, los tipos de tareas (pedagógicos o sociales, por ejemplo), y su mismo estado actual, en el que se está luchando por hacer diseño curricular a partir de este "enfoque", pero que aún no ha alcanzado el nivel de delimitación y consagración de un método, pese al boom actual. Se encuentra justo en ese proceso.
Les repartí un libro, de la editorial Difusión, AULA LATINA, que articula su material didáctico en función de diferentes tareas (buscar un compañero para compartir depar, describir los compañeros de clase, planear un día de viaje, preparar un bufet para una fiesta, contar anécdotas, etc)
Alaeé, además, impulsó un debate crucial: ¿cómo garantizar que las tareas son significativas para los estudiantes? En realidad afrontar esa pregunta supone abordar la cuestión del análisis de necesidades, que comentaremos el próximo día.

También agradezco la pregunta de Felipe sobre la diferencia entre "análisis de caso" y "tarea", que ampliaré el próximo día.

El próximo día afrontaremos el diseño curricular de un programa basado en el enfoque comunicativo (en concreto, en su versión nocio-funcional) en contraste con otro basado en el enfoque por tareas. El resto de los modelos podemos descartarlos del foco de atención de esta clase, aunque cualquier duda o comentario sobre lo que ya trabajaron siempre será bien recibido.

Un último comentario: las sesiones de exposiciones siempre son un reto. Nos falta, a todos, mucha cultura expositiva, y es difícil crear una dinámica intelectual positiva en el salón de clase. en el caso de ustedes, el grupo tiene una actitud muy valiosa, y creo que cada vez nos sentimos más cómodos y más preparados para enriquecer la formación que se genera en clase. Gracias por su participación.

3 comentarios:

Rous_lyn dijo...

Creo que la cultura expositiva de nosotros ha sido cultivada por nuestra experiencia previa, es decir, desde la secundaria exponemos pero "exponer= leer". Nos hace falta cambiar nuestra perspectiva, además de que nosotros reproducimos ese modelo en nuestros alumnos y, en ocasiones, es difícil cambiarlo en los alumnos porque ellos dice "pero si el otro profesor nos dijo que estaba bien".
Tendremos que ser más analíticos y críticos con respecto a la información y hacer mejor uso de herramientas de exposición.
Podría ser bueno que al pedir exposiciones quedaran claros algunos puntos sobre "que debe de contener la exposición". Ese es mi punto de vista.

Orquídea Moyao dijo...

Esa actividad que menciona es seguramente la más conveniente ya que vamos a poder ver la diferencia en algo real entre tarea y caso.
Ese libro nos gustó mucho, ayer jueves no dejábamos de verlo interesante además de actual, por eso tiene mucho éxito ese enfoque, aunque como dice Felipe, talvez conocerlo mejor o poder aplicarlo correctamente nos ayudará a sacarle todo el provecho.

Sergio Reyes dijo...

Tienes razón, Alma, y podría hacer los comentarios en el mismo salón. Sólo que a menudo siento que no disponemos de mucho tiempo y por eso prefiero hacerlo por escrito, para no gastar minutos de clase, y también para poder madurar más mi comentario. Tomo, además, tu propuesta de pasarles información sobre el arte de la exposición. Se lo haré a sus correos personales.

Respecto al libro AULA LATINA, Orquídea, en realidad es uno de los pocos que se han consagrado como Enfoque por tareas del español como tal (es decir, en los que el propio índice se organiza en función de tareas específicas, sin que éstas sean un refuerzo suburdinado a otros objetivos de enseñanza, ya sean gramaticales o comunicativos). Sin embargo, como bien observaron el libro también intenta integrar cierta dosis de enseñanza gramatical, y de establecer, también, un repertorio de objetivos comunicativos. En otras palabras, se trata de una versión "suave" del enfoque por tareas, y aún ustedes podrían ser más ambiciosos y experimentales en su dossier de materiales y en su diseño curricular, y plantear posibilidades más radicales.